Homenajes en cascada

Plácido Domingo recibe en la misma jornada la Orden de las Artes, su undécimo doctorado honoris causa y el aplauso del mundo de la música

15.01.11 - 00:29 -
MIGUEL LORENCI | MADRID. Nortecastilla.es


A una semana de su 70 cumpleaños, el tenor Plácido Domingo vivió ayer una jornada histórica. El Gobierno le concedía la Orden de las Artes y de las Letras de España, reconociéndole como «uno de los grandes embajadores del español y su cultura en el mundo», en la misma mañana en la que recibía un nuevo doctorado honoris causa por la universidad privada Alfonso X el Sabio. Por la tarde eran los compañeros del mundo de la música popular quienes le mostraban su cariño y respeto en un acto privado al que se sumaron Ana Belén o Miguel Ríos.
Unas celebraciones que irán 'in crescendo' hasta el próximo viernes día 21, cuando el Teatro Real en el que vuelve a triunfar celebre un concierto muy especial con motivo del septuagésimo aniversario del tenor, al que señala como el mejor del mundo y que parece vivir una nueva juventud. Un Plácido Domingo que desborda energía, plenamente recuperado de la operación de cáncer de colon a la que se sometió en marzo de 2010. En abril estaba de vuelta en los escenarios y en julio triunfaba en Madrid con 'Simón Bocanegra'.
El Consejo de Ministros aprobó en su reunión de ayer el decreto con el reconocimiento al gran tenor por «el prestigio, la trayectoria profesional impecable y valorada internacionalmente», y su contribución «al conocimiento de la cultura fuera de nuestro país».
El tenor madrileño tuvo noticia de este reconocimiento en el transcurso del acto de investidura como doctor honoris causa por la Universidad Alfonso X el Sabio, en el Campus de Villanueva de la Cañada. Un doctorado que se suma a los que antes le otorgaron universidades como las de Oxford, Georgetown, Nueva York o la Complutense de Madrid, la única pública que le había ofrecido antes este reconocimiento en España.
Ataviado con la preceptiva toga y el birrete azul, un emocionado Plácido Domingo agradecía el reconocimiento académico que recibía horas después de volver al Teatro Real de sus amores debutando en el papel de Orestes en 'Ifigenia en Táuride', de Gluck. Una función para la historia en la que volvió a cosechar un gran éxito certificado por el entusiasmo y la larga ovación del público. Cerraba la jornada mágica para él con una gala organizada por la Sociedad de Artistas y Ejecutantes en la que se anunciaba la participación de artistas como Miguel Ríos, Ana Belén, Ana Torroja o Mónica Naranjo.
Nacido en Madrid el 21 de enero de 1941, hijo de los cantantes de zarzuela Plácido Domingo y Pepita Embil, que emigraron a México, la segunda patria del tenor y en la que completó sus estudios de piano y dirección de orquesta, Domingo debutó en Monterrey con apenas 20 años como el Alfredo de 'La Traviata'. A lo largo de estas cinco décadas, el tenor español no ha dejado de acumular reconocimientos nacionales e internacionales, como la Medalla de la Libertad de Estados Unidos, la Legión de Honor de Francia o el nombramiento como Honorable Caballero del Imperio Británico o el Príncipe de Asturias de las Artes en 1991.